Con el fluir lento del verano (para algunos), con el fluir denso del verano (para algunos) invitamos al lugar común de la lectura que pasa y se queda, al juego de la ola en la playa, del viento girando en la sierra mientras brillan las flores en la montaña blanqueada.
Compartimos las palabras saboreadas durante el año que pasó, botellas al mar, miradas con peso propio, rastros en cuadernos viajeros:
"Si hay que definir qué es leer, nos encontramos apostados entre muchos
puntos de vista, sin embargo, se puede decir que leer, es mirar al
interior de las imágenes, de las palabras, de los gestos, de los
sonidos, adentrarse a un mundo de significación, donde todo tiene valor,
donde todo cobra peso y expresa algo.
Como individuos, mientras transcurre el día incoscientemente leemos a
nuestro paso, toda nuestra vida.
No es solo descifrar el código en el que está escrito algo, va más
allá, porque cuando uno lee aprende a mirar y decodificar la vida de
otra manera." Andrea F.
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